La séptima edición del Festardor se ha celebrado en Puerto de Sagunto. Cuatro días, más de 150.000 m2 repartidos en tres escenarios (dos de rock y uno de rap), más de 50 artistas y más de 20.000 asistentes. ¡Entre ellos nosotros!
En cuanto vimos el cartelazo que tenía este año el Festardor supimos que no nos lo podíamos perder. Además, Puerto de Sagunto está relativamente cerca de casa, por lo que no hacía falta ni acampar.
El festival y la organización
Pese al nivel de los artistas del cartel de este año, el Festardor es un festival «pequeño» comparado con el ViñaRock, por ejemplo, que es al que vamos desde hace 8 años. Aún así, en el recinto estaba todo bien organizado y no echamos de menos nada.
Como se celebraba en un espacio industrial cercano al puerto toda la ambientación estaba diseñada con contenedores, coches viejos, camiones, ruedas, pallets, etc. Algunos de estos contenedores se utilizaron para hacer una exhibición de graffiti durante los días del festival.
¿Lo mejor?
Como el recinto no es excesivamente grande y los escenarios están bastante cerca unos de otros, es fácil moverse y poder ver varios conciertos o llegar a tiempo al que quieres ver. Además, para nosotros en concreto los horarios eran perfectos; no se solapaba ningún grupo de los que queríamos ver sí o sí. Excepto el último día que SFDK se retrasó un poco, los horarios se siguieron estrictamente y todo empezó y acabó a su hora establecida.
El acceso también era bastante rápido y fluido todas las veces que entramos y salimos. En las barras de bebida y de compra de tokens tampoco encontramos mucha cola ninguna de las veces. ¡Todo genial!
Otro punto a favor es que se apostara por la reutilización de los vasos. Para comprar la primera bebida era necesario pagar 2€ por el vaso (con la cuerda para el cuello) y después ya te servía para todas las veces. De esta manera se reduce bastante el uso del plástico en el recinto.
¿Lo peor?
Aunque nosotros no lo sufrimos porque no tuvimos que acampar, sabemos que hubo algún problema con el tema del camping libre. Había uno pagando (Camping Gerencia) que por lo visto estaba bastante bien, pero en las zonas libres gratuitas el primer día se quedaron sin espacio. Aunque «pronto» el festival buscó una solución, sabemos que la gente no quedó muy contenta porque estaba muy lejos, apenas había baños, etc.
Conciertos
Entre los cuatro días vimos un montón de conciertos; algunos enteros y otros a mitad porque nos íbamos moviendo de un escenario a otro.
DÍA 1
- Capaz. Lo vimos de pasada pero guay.
- Soziedad Alkoholica. Un clásico; no faltan en ningún festival.
- Costa. Muy «en su línea».
- Combo Calada. Buen rollo para acabar el primer día.
DÍA 2
- Fernando Costa. Un poco «arreu» (como es él) pero muy guay.
- Benito Kamelas. Hubo un momentín que le falló el audio, pero él lo solventó con mucha naturalidad. Muchos recuerdos y emoción con las canciones antiguas.
- El Chojin. No es nuestro rapero favorito pero en directo es MUY bueno y vale la pena verlo. La velocidad a la que rapea no es de este mundo.
- Celtas Cortos. Música alegre para no parar de moverse, pero solo nos sabíamos las típicas.
- Fyahbwoy. Hacía tiempo que no lo veíamos sin banda y nos gustó más así, aunque las canciones nuevas no las conocíamos.
DÍA 3
- El niño de la hipoteca. Vimos solo un trocito porque apenas lo habíamos escuchado.
- Green Valley. Muy buen rollo, como siempre.
- Denom. Era la primera vez que lo veíamos en directo y nos encantó.
- Nach. Un clásico, aunque solo nos sabíamos las antiguas.
- Ayax y Prok. Ellos son ENORMES y su energía es lo más.
DÍA 4
- Sons of Aguirre. Reivindicación, humor y mucha energía. Pese a coincidir con Sho-Hai había mucha gente.
- Sho-Hai. Maestro, siempre.
- Natos y Waor. Conciertazo y puesta en escena muy TOP con la calavera.
- SKA-P. Dos horas sin parar de saltar con los clásicos y con las canciones nuevas. Acabó con fuegos artificiales. ¡Son enormes!
- SFDK. Aunque ya no nos quedaban fuerzas, Zatu y Acción Sánchez nunca decepcionan. Creo que es el grupo que más veces hemos visto en directo.
Comida y zona de descanso.
En la zona de la entrada había una especie de zona de descanso habilitada con mesas hechas de palés, ruedas de camión para sentarse, césped artificial y food trucks.
Aunque los precios son algo elevados (como en todos los festivales), había bastante variedad de comida: Hamburguesas, pizza, patatas, tortilla, perritos, asiática, vegana, sin gluten…
¿Más?
Si quieres saber más sobre cómo ha sido esta edición del Festardor y no perderte la próxima puedes visitar su web o seguirlos en Instagram.
